¿Debo cortar el pelo de mi gato?
Cuando
llegan las épocas del año más calurosas, como el verano y las primeras semanas
del otoño, es normal pensar en dar un alivio a tu gato. Piensas que estará
sintiendo el mismo calor que tú y deseas librarle de él. Pero has de tener en
cuenta que tu mascota lo experimenta de una manera diferente a como tú lo
haces. Por lo tanto, surge una duda: ¿cortar el pelo al gato o
no?
A continuación, te damos algunos
consejos sobre lo que has de hacer en estos casos. Presta atención a lo que te
vamos a contar.
¿Cómo sienten el calor los gatos?
A los gatos les molesta el calor,
aunque no de la misma manera que a nosotros. Imagina que una persona tuviera
que ir recubierta de mantos de pelos durante los días más soleados. Es
algo que, sin duda, no podríamos soportar.
Entonces, puede que te preguntes:
¿por qué los gatos llevan mejor esta situación? La respuesta es que el
pelaje de los gatos no aporta más calor. De la misma manera que
protege del frío en invierno, funciona como una especie de aislante
térmico cuando hace calor.
Por lo tanto, los pelos ejercen
como una especie de protector del calor, dado que en sus mantos se
forman bolsas de aire y corrientes. De este modo, se va a
ralentizar la absorción del calor, que será mucho más llevadera.
Así que no pienses que a tu gato
le va a venir bien lo mismo que a ti. No le cortes el pelo cuando note el
calor. A continuación, te damos algunos consejos sobre qué hacer en esas épocas
del año.
Cuidados del gato para que no pase calor
Aunque el pelo proteja al animal
del calor, debes valorar algunos cuidados del
gato para rebajar la temperatura de su cuerpo. Tampoco te
has de cerrar por completo a cortarle el pelo, ya que, si ha padecido una
enfermedad o un accidente o se le ha pegado alguna sustancia pegajosa (como,
por ejemplo, un chicle), esta acción puede convertirse incluso en necesaria.
Asimismo, algunos ejemplares con
abundante pelaje pueden pueden requerir el corte de pelo. En estos casos, se
les pueden formar nudos o acumulaciones de pelos muertos (con
el peligro que estas bolas entrañan para los gatos). Estas concentraciones de
pelos no dejan que el calor salga del cuerpo de tu mascota,
por lo que resultan inoportunas.
Aparte de cortando un poco el
pelo del gato, sin pasarte (si su piel queda sobreexpuesta, la radiación puede
producir quemaduras e incluso peligro de padecer cáncer), puedes
evitar los nudos cepillando a diario al gato. Que no se te
pase, por tanto, acondicionar a tu gato mediante el cepillo
específico para estos menesteres.
Finalmente, recuerda que la temperatura
corporal de los gatos disminuirá con una buena hidratación. Que
tengan suficiente agua en sus bebederos (incluso
con cubitos).
En definitiva, ya sabes que, en
principio, no has de cortar el pelo de tu gato.
Aprende, de otras maneras, a evitar que pase calor.